El teatro como herramienta para conocer mejor el mundo de las personas que sufren exclusión y para transformarlo de la mejor manera. Nos ofrece herramientas y estrategias para analizar los conflictos y encontrar nuestras propias soluciones. Es una herramienta transformadora que facilita la gestión y resolución de los conflictos de manera pacífica y pactada. Un valor añadido del proyecto es que los propios agentes sensibilizadores son personas en situación de exclusión social. Los actores y actrices de las obras de teatro también serán personas usuarias. De esta forma, las personas asumen roles de mayor responsabilidad y compromiso para con la ciudadanía e invierten sus roles pasando de ser receptoras de solidaridad a ser productoras de valor social.